Ayer tenía yo planes para entrenar, motivación, piernas frescas, pero la cosa se torció. La Renfe, con las sempiternas averías "en el tren precedente", que hacen que si no es bastante con salir tarde de trabajar, llegues a casa más tarde de lo normal y cabreado como una mona por hacerme perder el tiempo. El caso es que cuando me quise poner a entrenar ya eran más de las nueve, asi que adios a mi idea de trotar 20' y hacer 1 hora de rodillo. Hice 40' de rodillo con alta cadencia, y el pulso ni idea, porque me dejé la cinta del pulsómetro (día perfecto por los cojones), casi 20 Kms, y la esperanza de que hoy los hados me dejen hacer la sesión que me salté ayer. No envié a mis naves a luchar contra los elementos...
1 comentario:
Jo, con lo que mola vivir a tomar por c*lo del trabajo, hombre!!!!!
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